En 2025 tendrá lugar el cuarto centenario del fallecimiento de Francisco Gómez de Sandoval y Rojas, I duque de Lerma, constituyendo esta efeméride una oportunidad para re­flexionar sobre su figura y su tiempo. Lerma es, sin duda, una de las personalidades más fascinantes del rico y sugestivo panorama del Siglo de Oro español, tan compleja como controvertida y cuya lectura exige una perspectiva multifocal que permita acercarnos a su poliédrica personalidad.

De ahí que, desde la Cátedra de Estudios del Patrimonio Artístico Alberto C. Ibáñez de la Universidad de Burgos se haya considerado apropiado la organización de un congreso bajo el título En el laberinto cortesano. Poder, arte e identidad en tiempos del duque de Lerma que tendrá lugar en Burgos del 18 al 21 de septiembre de 2024.

La multiplicidad de aspectos que confluyen en el estudio de la figura del duque de Lerma y su contexto, convierten este periodo en uno de los más atrac­tivos de la Historia Moderna de los reinos hispánicos y muy sugestivo para la cultura y las artes, por el interés de unas propuestas que terminarían eclosionando en el Barroco pleno. Pero, también, un tiempo de difícil lectura para los no iniciados, o para quienes no gozaban de los apoyos precisos, donde la fortuna era cambiante y el éxito efímero. Quizá por eso don Francisco asombró especialmente a sus contemporáneos, pues fue admirado tanto por su grandeza como por el escaso tiempo en el que había alcanzado sus logros. La fascinación que ejerció y la animadversión que despertó siguen mereciendo ser objeto de reflexión y a ello pretende contribuir este congreso, a través de cuatro líneas temáticas donde articular las contribuciones presentadas.

Líneas temáticas

1. Un universo de dos centros: el rey y el valido
El reconocimiento de un valido gestó una importante literatura política que justificaba la “per­fecta amistad” del monarca hacia aquél, convertido en su alma gemela. Esta construcción se basaba en el reconocimiento público de sus múltiples virtudes y numerosos méritos, que le hacían la persona más capacitada para ayudar “a llevar a Su Magestad el peso desta Monarquía’, según indicaba Mantuano en la crónica de los Casamientos de España y Fran­cia de 1615. Tal planteamiento convertía al duque de Lerma en una suerte de renovado y esforzado At­las que le permitía mostrarse como el alter ego del soberano, también le llevaba a un esfuerzo titánico en el ejercicio de una administración cada vez más burocratizada y de compleja estructuración como la de la Monarquía Hispánica.

2. Los satélites y las redes de poder: de prudentes y avisados
Al igual que en la comprensión del universo, la tierra había dejado de ser el centro para girar alrededor del sol, generándose una dualidad de referentes que podían resultar confu­sos a quienes no estaban iniciados, la sociedad cortesana se hizo aún más compleja al exis­tir dos polos de atención. La tradicional estructura piramidal en la concesión de favores, que alimentaba el sistema nobiliario basado en la cercanía al monarca, se había convertido en un laberinto al no tener un único punto culminante sino dos que obligaba a tejer complicadas redes de poder. El cortesano muda la prudencia, definitoria de los tiempos de Felipe II, por la discreción, entendida como “el arte de adaptarse a las circunstancias del entorno social con el fin de sobrevivir a las tormentas durante la navegación cortesana”, que generó la construc­ción de sugerentes estrategias para obtener el éxito en la corte, mientras que para quienes estuvieron más preocupados por la virtud moral, el laberinto se transformó en una Babilonia cuyos peligros aconsejaban estar “avisados”.

3. Juego de espejos: imagen y representación
La complejidad de la vida cortesana encontró su mejor eco en la importancia concedida a la retórica visual como argumento de poder que, con múltiples implicaciones interrelacionadas en un continuum, siempre era cuidada y adquiría los tintes de extremosidad propia de un incipiente Barroco. Así, tanto los aspectos materiales como aquellos intangibles se tenían en cuenta en un delicado y meditado universo de formas y presencias. La imagen retratística, las galerías de antepasados, la presentación en los espacios públicos y privados, con singulares especificidades en las esferas femeninas, los ceremoniales y el aparato o las fiestas, constituyen una elocuente muestra de las variadas posibilidades al alcance de las élites que utilizaron todos los recursos disponibles para dejar patente su condición y la posición conseguida en el juego cortesano.

4. Asombrando al mundo: promoción artística y cultura al servicio del poder
Si las formas de presentación y autopresentación resultaban determinantes en la con­figuración de una imagen de poder, no lo fue menos la promoción artística y cultural a la que recurrieron los privilegiados como instrumentos que les permitían construir identidades, tanto personales, como de grupo. La edificación de residencias convertidas en referentes de las Ca­sas y linajes, las fundaciones religiosas, piadosas o asistenciales que escenificaban la alianza con la Iglesia para garantizarse la salvación, las colecciones atesoradas de los más variados y preciados objetos que admiraban tanto por su coste como por su singularidad o exotismo y el mecenazgo de artistas, escritores o músicos, contribuyeron a reforzar la posición de pre­eminencia y prestigio adquirido. Se estableció, así, una cultura de la emulación que buscaba asombrar por la grandeza y donde las mujeres tuvieron, también, su particular protagonismo y aportación.

Propuestas de comunicación

Esta reunión científica está abierta a la participación de todos aquellos in­vestigadores que, desde distintos presupuestos, estén trabajando este periodo, pudiendo aportar sus resultados a través de comunicaciones.

Las solicitudes de participación deberán enviarse por correo electróni­co acompañadas de un resumen de la comunicación (entre 1.000 y 1.500 caracteres con espacios)

antes del 15 de junio de 2024
a la dirección: catedraalbertoibanez chez ubu.es

Las propuestas aceptadas por el Comité Científico serán expuestas duran­te el Congreso y los textos se entregarán antes del 15 de octubre.

Los textos, tras someterse a una revisión por pares, serán incluidos en una obra colectiva publi­cada por una editorial de referencia (aún sin determinar).

Las comunicaciones aceptadas para su publicación no superarán los 35.000 caracteres (con espacios, notas y bibliografía).

Comité organizador
Dirección del Congreso
María José Zaparaín Yáñez. Universidad de Burgos
Julián Hoyos Alonso. Universidad de Burgos
René Jesús Payo Hernanz. Universidad de Burgos
Secretaría técnica
Ana Berta Nieto Plaza. Fundación General de la Universidad de Burgos
Comité científico
Antonio Feros. The Pennsylvania State University
Carolina Naya Franco. Universidad de Zaragoza
Amorina Villarreal Brasca. Universidad Complutense de Madrid
José Javier Vélez Chaurri. Universidad del País Vasco
José Matesanz del Barrio. Universidad de Burgos
Leticia Sánchez. Patrimonio Nacional

Lieu : Cátedra de Estudios del Patrimonio Artístico Alberto C. Ibáñez de la Universidad de Burgos
Burgos, Espagne